Una artista agradecida
A punto de sacar su primer disco en 12 años, Cher habla de todo: del cambio de sexo de su hijo, de política y destaca el rol de la comunidad gay en su carrera.
The New York Times
Cher se ha encontrado con todo tipo de nombres famosos. Ha compartido escenario con Bette Midler, se ha asociado con Madonna y ha trabajado para Phil Spector, quien fue su primer jefe y, según ella, le pagó 25 dólares por un año de labor. Incluso, tuvo algo con Tom Cruise en los años `80 antes de que él se convirtiera en cientólogo. Así que cuando una persona llamó al programa de Andy Cohen, Watch What Happens Liv, y le preguntó recientemente a quién soñaría con estrecharle la mano, no tenía mucho más que responder además de Jesucristo.
Cher, de 67 años, con saco negro y blanco a rayas de Ann Demeulemeester y pantalón a rombos negro y blanco, sabía también exactamente lo que ella le preguntaría. "Solo quiero decir: `amigo, ¿de qué se trata?`", le dijo a la pequeña multitud, en su mayoría gay. Había hombres gay delgados y gays gordos, hombres gay con muñecas Cher y gays con remeras Cher súper ajustadas mostrando sus abultados bíceps.
El particular público en el clubhouse de Cohen no fue una sorpresa, ya que Cher se encontraba en Nueva York para la celebración del Orgullo Gay, en una gira de promoción de su nuevo simple Woman`s World, sumando su influyente aporte a la decisión de la Suprema Corte de anular la Ley de Defensa del Matrimonio. Cuando todo hubo terminado, ella no se retiró a su hotel a cenar sino que invitó a un periodista a charlar en una oficina de los estudios de Bravo.
En esta era de estrellas-robots rígidamente controladas, ningún tema parecía estar fuera del alcance de la conversación (a excepción de su estado civil). Habló con franqueza sobre el cambio de su hijo Chaz Bono de mujer a hombre y confesó que todavía tiene problemas con qué pronombres usar. Admitió que al principio le fue difícil emocionalmente el tema, pero agregó que ya lo ha aceptado y que no podía estar más orgullosa de él.
Además, no perdió la oportunidad de arremeter contra el Partido Republicano. "Van a arruinar al país", dijo Cher. "Son una locura. Preferirían ver al país incendiarse que trabajar con el presidente Obama".
Y también habló de sus exnovios. Dijo que su relación sentimental con Robert Camilletti, empleado de una tienda de bagels y cantinero, casi 20 años más joven que ella (Cher tenía 40 años y él 22 cuando se involucraron) fue el vínculo más fácil que ha tenido. "Nunca hubo un problema", contó. "Nunca una preocupación. Soy temperamental. No como una estrella, pero soy voluble, y si estaba como un manojo de nervios, me decía: `Voy a conseguir cigarrillos y te traeré una galleta de chocolate y crema`".
El primero de sus dos esposos, Sonny Bono (el segundo fue Gregg Allman), fue con quien estuvo más unida, dijo. "No hubo nada igual antes o después", dijo Cher. "Y no todo eran rosas. Era bastante similar a una ruleta rusa".
Después de eso, habló de su carrera en Hollywood. Admitió que no recibe tantas llamadas como antes. Y que pensó que el motivo puede tener algo que ver con su famoso rostro sin arrugas.
Recordó haber leído hace unos años un artículo en el que un periodista dijo que la estrella no se veía ni joven ni vieja; era simplemente Cher. "Eso no se sintió muy bien, pero era verdad", dijo. "Pensé: `lo entiendo; entiendo eso`".
Esta mujer sin arrugas también opinó sobre el envejecimiento. Y fue contundente: "Es una porquería. No me gusta. Cualquiera que diga que sí le gusta, está mintiendo. O no tiene mi trabajo".
Su imagen sigue causando polémica. Hace unas semanas llevaba una peluca en el programa de televisión The Voice que un periodista del The Huffington Post calificó como similar a algodón de azúcar o a un perro salchicha. A Cher no le importó. "Sólo pensé: `voy a hacer algo interesante y divertido`", dijo. "Me gusta disfrazarme. Creo que hace feliz a la gente".
Ahora, la artista se apresta a lanzar lo que será su primer disco después de 12 años: Closer To the Truth(Cerca de la Verdad), que se pondrá a la venta en septiembre. Luego, probablemente se irá de gira con un desfile de nuevos trajes de Bob Mackie, su viejo amigo y cómplice de locuras, quien la produjo para los Oscar en 1986 con un tocado de plumas y un traje de cuentas con la panza casi al desnudo.
Algo que tal vez no haga Cher es otra extensa temporada en Las Vegas, como lo hizo entre 2008 y 2011. Allí realizó 200 conciertos, con 14 bailarines y cuatro acróbatas, y con más de 20 cambios de vestuario.
Pero seguía teniendo problemas de garganta y no podía dejar de pensar que su concierto era lo último que separaba a la mayor parte de su público de un hogar de ancianos o del más allá. "Pensé: `bueno, este es, probablemente, el último buen concierto que van a ver`", dijo ella, sin sonar del todo entusiasmada por tener este honor. "Eran muy formales".
Pero esta vez el público era joven y con muchas ganas de ir al club Marquee de Nueva York, sitio donde Cher se dirigía después del programa de Cohen. Ella apenas pudo llegar hasta allí.
En primer lugar, demoró demasiado en cambiarse la peluca, lo que no sorprendió a su mánager, Lindsay Scott. ¿Cuánto tiempo de su vida lo pasa esperando a que Cher se cambie y quede casi inmovilizada? "Una buena cantidad", dijo Scott.
Además, se produjo un embotellamiento de tránsito de casi 30 minutos cuando la minicaravana de Cher se topó con un control de seguridad. Para cuando llegó al club, pareciendo un torero de la era espacial, eran la 1 y 30 de la mañana y sólo la sesión de fotos llevó media hora porque había mucha gente vestida como Cher esperando para tomarse una imagen con ella. "Creo que vamos a tener que hacer esto de dos en dos", dijo su publicista, Liz Rosenberg.
Tras posar para un montón de fotógrafos y recibir otro retoque de uno de sus maquilladores, Cher hizo un par de entrevistas rápidas antes de entrar al club. La primera persona con la que se topó fue un travesti que parecía haberse reconstruido toda la cara para parecerse a su ídolo.
Cher no se inmutó. "Creo que todo el mundo quiere hacer lo que quiere hacer", dijo. "Si a él no le molesta, a mí no me molesta. No me siento rara. No, yo no".
Ella dejó en claro lo agradecida que estaba por todo su apoyo, a los que habían aguantado año tras año, década tras década, convirtiendo fracasos pop en éxitos de club y fracasos de taquilla en clásicos de culto. "He tenido altibajos, pero ustedes nunca me han abandonado", dijo, al sonido de grandes aplausos. "Siempre han estado ahí".
UNA MUJER DEL CINE Y DE LA MÚSICA
Algunos hitos en su carrera
-Cherilyn Sarkisian nació en California, en 1946. De adolescente decidió abandonar los estudios para cantar en clubes nocturnos e hizo grabaciones como cantante bajo múltiples seudónimos para Phil Spector.
-En 1964 contrajo matrimonio con Salvatore Sonny Bono (1935-1998). Formarían el famoso dúo Sonny & Cher, con el que vendieron discos de gran éxito hasta finales de los sesenta y realizaron sus primeras apariciones en el cine. Con Sonny cantó I got You, babe(1965), primero de una serie de superventas. El dúo se separó en 1974, y tras un período sabático, el segundo simple de Cher en solitario ya logró entrar con fuerza en las listas.
-En los ochenta adquirió una fundada reputación como actriz. Fue nominada al Oscar a Mejor Actriz de Reparto por su papel en Silkwood(1983) y obtuvo el aplauso de la crítica.
-Paralelamente retomó su carrera musical y editó los álbumes Cher(1987), Heart of Stone(1990) y Love Hurts(1991). El tema If I could turn back time(1988) devolvió a Cher a un lugar destacado en el público y la crítica. En 1989 empezó otra vez a entrar con fuerza en los rankings.
-En 1998 sorprendió con la edición de Believe, tema de adelanto del álbum del mismo título. El disco fue número uno en medio mundo, confirmándola como la nueva diva del dance.
-En septiembre próximo lanzará su próximo disco Closer to the Trouth, y ya realiza la gira promocional del simple Woman`s World.
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